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Hay que tener en cuenta que para que la negociación se resuelva con éxito es necesario preparar previamente la conversación que se va a llevar a cabo. Además del modo de enfrentar la situación, es imprescindible realizar una investigación para conocer el contexto del mercado laboral.

¿Sabías que el salario es el factor más importante a la hora de decidir si cambiar o no de empleo? Según el informe "tendencias anuales en sueldos, beneficios y lugares de trabajo 2017" de Randstad, un 74 % de los encuestados afirma que la retribución económica es la principal motivación para esto, 3 puntos porcentuales más que el año anterior. Si esto es especialmente relevante en el mundo laboral, cobra aún más protagonismo si se trata del primer sueldo de un trabajador.



Sin embargo, a la hora de negociar un contrato, no hay que ceñirse únicamente al sueldo, sino también a los beneficios como los bonos por productividad, los seguros o los gastos de transporte. Para ello, la mejor manera de hacerlo es estar preparado, conocer la situación del sector y, sobre todo, no fiarse de los viejos mitos que existen sobre el primer empleo.



Negocia sin complejos: desmontando mitos

Pactar un salario es un tema complejo para cualquier profesional y si, además, es la primera vez, el reto es aún mayor. Para afrontar este momento de la mejor forma, es imprescindible aclarar una serie de creencias que se suelen adoptar y que están muy alejadas de la realidad empresarial:

  • La falta de experiencia. Un profesional que acaba de dar sus primeros pasos en mundo laboral puede pensar que no tiene opciones de negociar su sueldo, ya que no posee ninguna experiencia previa. Esta afirmación es totalmente falsa, ya que la preparación académica también enriquece el currículum vitae y, actualmente, las empresas no solo valoran la aptitud, sino también la actitud. Al mostrarte seguro de ti mismo en una negociación, pondrás en valor tus conocimientos y habilidades, haciendo saber a la empresa que eres un profesional apto para el puesto.
  • Miedo a recibir un no por respuesta. Aunque la empresa no apruebe un aumento de salario, la propia negociación demuestra una actitud asertiva y decidida. Igualmente, siempre es beneficioso adquirir experiencia afrontando este tipo de situaciones, ya que servirá como aprendizaje para una futura contratación.

     
  • ¿Cómo saber qué sueldo proponer en la negociación? El proceso de negociar conlleva siempre que ambos implicados estén dispuestos a ceder en sus intereses. Es muy probable que no se alcance la cantidad solicitada inicialmente, por lo que lo más adecuado es tener en cuenta este pequeño margen de maniobra.

     
  • El momento adecuado para afrontar el tema. Es bueno motivar la conversación de manera clara y decidida. Sin embargo, lo ideal es hacerlo una vez se han superado varios estadios del proceso de selección. De este modo, el candidato se encuentra en el momento perfecto para iniciar un acuerdo, una vez ya ha demostrado su valía profesional y todo lo que puede aportar a la empresa.

     
  • Beneficios sociales, otra carta para negociar. No solo el sueldo debe entrar en el proceso de negociación, sino que hay otros elementos con los que también se puede jugar para conseguir una mejor posición en la empresa. Conciliación laboral, formación gratuita, flexibilidad horaria… Son muchos los beneficios laborales que podrían mejorar notablemente un salario medio. 

Descubre la banda salarial de la posición vacante

Hay que tener en cuenta que para que la negociación se resuelva con éxito es necesario preparar previamente la conversación que se va a llevar a cabo. Además del modo de enfrentar la situación, es imprescindible realizar una investigación para conocer el contexto del mercado laboral.



De esta forma, dispondrás de un conocimiento contrastado sobre la banda salarial del puesto al que se quiere acceder. Para ello, será importante tener en cuenta variables como la especialidad profesional, la ubicación geográfica o la formación académica. En el caso de tratarse del primer empleo, habría que tenerlo también en mente a la hora de conocer el mercado, puesto que la experiencia influye en la retribución ofrecida.



Hay diversas formas de obtener dicho conocimiento; una de ellas es contactando con compañeros de profesión que estén trabajando en el puesto al que se quiere acceder, consiguiendo ejemplos prácticos de la situación laboral. Otra de ellas es averiguar la banda salarial que se está manejando en el mercado con tus características profesionales. Para ello, con la calculadora salarial de Randstad, puedes averiguar de una forma rápida y sencilla el sueldo mínimo y máximo del puesto laboral que te corresponda. ¡Con esto ya estarás preparado para el momento de la negociación!



Aprender a negociar con educación y profesionalidad desde el primer empleo te convertirá en un candidato decidido y con aspiraciones, que defiende sus derechos laborales y valora sus conocimientos. Además, te dará experiencia para poder solicitar un aumento de sueldo en el futuro. No olvides que estar capacitado para gestionar estas situaciones durante un proceso de selección te otorgará un gran valor añadido, además de autoconfianza. Unas cualidades que, sin duda, los profesionales de Recursos Humanos no pasarán por alto.



Y tú, ¿has negociado tu primer sueldo?